EFE.-La directora del Servicio Secreto de Estados Unidos, Kimberly Cheatle, dimitió este martes, luego de las fuertes críticas ante la actuación de esta agencia en el atentado contra el expresidente Donald Trump.
La víspera, Cheatle reconoció que el Servicio Secreto fracasó en su misión de evitar el intento de asesinato contra el exmandatario estadounidense, pero rechazó los pedidos de que renunciara al cargo.
La cadena NBC adelantó, citando a tres fuentes familiarizadas con el tema, que la renuncia se ha producido después de varios llamamientos de los legisladores para que renuncie.
Precisamente ayer Cheatle compareció en un comité de la Cámara de Representantes y afirmó que el intento de asesinato al expresidente Donald Trump supuso el “mayor fallo operativo” de la agencia “en décadas”.
Cheatle asumió “la responsabilidad completa” del lapso en “seguridad” de su agencia y aseguró que coopera con las investigaciones en curso sobre el atentado.
La directora estaba sometida a presión de demócratas y republicanos que pedían su dimisión después de que un hombre de 20 años hiriera al candidato presidencial republicano en una oreja durante un mitin el 13 de julio en Pensilvania (este).
Asimismo, el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, había pedido la renuncia de Cheatle. En diálogo con reporteros, dijo que la dimisión era “obligada”.
“Ahora tenemos que reconstruir los pedazos. Tenemos que reconstruir la fe y la confianza del pueblo estadounidense en la agencia del Servicio Secreto”, subrayó Johnson, republicano.