Crisstian Villicaña
Más de 50 agrupaciones cannábicas y de cáñamo en México piden a la Comisión Federal de Riesgos Sanitarios (Cofepris), aclarar las diferencias entre el cannabis medicinal y de uso personal, del cáñamo para la fabricación de distintos productos textiles, cosméticos, automotrices, entre otros.
Lo anterior fue expuesto luego que se emitiera por el Gobierno de México un comunicado titulado “Sentencia judicial obliga a Cofepris a emitir autorización sanitaria para cáñamo: representa riesgo a la salud”.
“La planta del cáñamo es genéticamente y físicamente diferente a la del cannabis. Por su casi nulo contenido de THC (sustancia psicoactiva), bajo costo, beneficios ecológicos y económicos desde la ONU se impulsa su cultivo y legalización en todo el mundo”, indica el texto de las asociaciones.
“Si bien es cierto, la autoridad sanitaria es la encargada de salvaguardar y proteger el control sanitario de productos y servicios, que pueden representar algún daño para la salud de la población. El cáñamo, por lo anteriormente expuesto, no representa peligro para la salud ni para la seguridad pública”, subrayan.
En ese sentido, consideran preocupante que esta comisión no sepa diferenciar entre el cannabis y el cáñamo, además, especifican que por ende la Cofepris no es la encargada de regular a la industria que se dedica a producir en base a cáñamo.
Añaden, que la prohibición generalizada que incluya al cáñamo es una medida innecesaria, excesiva y desproporcionada, ya que cuarta el derecho a sembrar, cultivar y cosechar la planta, la cual concentra porcentajes menores al 1% de THC.
Como ejemplo de la ilegalidad, exponen lo que hay plasmado en la fracción V del artículo 245, el cual señala lo siguiente:
V. Las que carecen de valor terapéutico y se utilizan corrientemente en la industria, mismas que se determinarán en las disposiciones reglamentarias correspondientes.
Los productos que contengan derivados de la cannabis en concentraciones del 1% o menores de THC y que tengan amplios usos industriales, podrán comercializarse, exportarse e importarse cumpliendo los requisitos establecidos en la regulación sanitaria.
“En estricto sentido, el cáñamo por lo anteriormente expuesto supondría ser liberado del sistema de restricciones a las que se encuentra sujeto la cannabis. No hacerlo es violatorio de derechos fundamentales consagrados en nuestra constitución, violatorio además de tratados y acuerdos comerciales internacionales”, concluyen.
El comunicado fue firmado por el presidente estatal del Partido Encuentro Social de Baja California (PES), Cesar Hank, Fundación Mexicana de Cannabis Medicinal AC., Cannativo movimiento de manos indígenas S.C., Hempresarios.
Así como por Asociación Mexicana de Medicina Cannabinoide AC (AMMCann AC), Concamed, Conidebid, entre otras.