El presidente Andrés Manuel López Obrador negó el arribo de militares estadunidenses a México, para labores de adiestramiento, sea una intromisión o violación a la soberanía. Dijo además que es una acción que forma parte de los acuerdos de cooperación entre los dos países.
La explicación surge luego de que el Ejecutivo solicitara al Senado el permiso para que 11 militares estadunidenses entren al país y que se reúnan con elementos del Ejército Mexicano para un entrenamiento especial.
Si se aprueba el permiso, los soldados permanecerán en México por alrededor de dos meses (del 23 de enero al 21 de marzo de 2024), a fin de capacitar a las tropas adscritas a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
“No es ninguna intromisión o afectación a nuestra soberanía…no son tropas, vienen periódicamente porque hay un acuerdo entre los ejércitos de México y Estados Unidos”, expresó el mandatario en su conferencia matutina del martes.