El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, señaló este jueves que, de acuerdo con la información que las autoridades le han proporcionado, las armas cuyo ingreso detectó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) no son de origen estadounidense.
“Que tienen calibres que se usan en el Ejército (de Estados Unidos), eso sí es posible”, informó el funcionario a la salida de la ceremonia de inauguración del Taller para Gerentes de Acreditación de la Comisión de Acreditación para las Agencias de Aplicación de la Ley.
“Yo no tengo ninguna información, en (los) dos años y medio que he estado aquí, (de) que estas son armas que vienen del Ejército de los Estados Unidos”, insistió Salazar.
Añadió que las administraciones de los presidentes Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden trabajan en conjunto para reducir el flujo que armas que entran a México.
El lunes, la canciller Alicia Bárcena indicó que autoridades mexicanas alertaron a sus homólogos estadounidenses que la Sedena había detectado la entrada al país de armas de uso exclusivo del Ejército de Estados Unidos, en una reunión que tuvieron delegaciones de ambos países la semana pasada en Washington D.C.
En respuesta, Salazar aseguró que el gobierno estadounidense investigaría dicho armamento.
“Estamos comprometidos a trabajar con la Sedena para ver qué es lo que pasó. Yo no lo tenía detectado. Cuando algo así pasa se recurre al intercambio de información. Lo llevamos, lo investigamos y vamos a ver qué ocurrió”, expuso el representante diplomático de Estados Unidos al ser cuestionado sobre el tema.
“Por empuje de Joe Biden tenemos una ley que hace un crimen grave para la gente que vende armas y las traslada a México. Entonces, dentro de la fiscalía hacemos un esfuerzo grande para desmantelar estas redes criminales y para llevar a los que están metidos en estas redes a juicio, ya llevamos muchísimos casos”, explicó Salazar.